Gregorio Samsa abre hoy la puerta de todos los hogares a través de Google. El protagonista de una de las obras más influyentes de la literatura universal, La metamorfosis, se ha adueñado hoy de la portada del famoso buscador el día del aniversario del nacimiento del autor de dicha novela, Franz Kafka.
Con un nuevo doodle, Google conmemora la efeméride con una imagen del señor Samsa convertido en insecto. El protagonista de La metamorfosis
se convierte en una especie de escarabajo gigante a los 23 años, cosa
que le incapacita para trabajar y hace que, a lo largo de esta novela
corta, su familia le repudie cada día más.
El
buscador más potente del mundo recuerda así al autor, uno d elos más
influyentes d ela historia pese a que su obra no fue muy extensa: tres
novelas (El proceso, El castillo y El desaparecido) y de una novela corta (La metamorfosis). Además,
dejó una abundante correspondencia y escritos autobiográficos, la mayor
parte publicados póstumamente. Murió a los 40 años, víctima de
tuberculosis, en Kierling (Austria), el 3 de junio de 1924.
Todas las obras de Kafka,
incluidas las incompletas, reflejan un estilo literario existencialista
y expresionista, comúnmente asociados con la estética y la filosofía, y
en algunos niveles se le ha acercado al realismo mágico.
De
las muchas obras que llegó a escribir durante su vida, sólo unas pocas
fueron publicadas gracias a su amigo Max Bond, quien ignoró el deseo
explícito de Kafka de que dichas obras, incluyendo los trabajos
incompletos, fueran destruidas.
Yerba amargaEl estilo literario del escritor praguense propició que le término kafkiano traspasara los muros de la filosofía y se instalara en el vocabulario popular cotidiano. Cuando se dice que algo es kafkiano, se pretende destacar que es absurdamente complicada, extraña e irreal, como las que relataba Franz Kafka en sus novelas.
Dicho
adjetivo se aplica a situaciones angustiosas, como las que relata el
autor en un universo angustioso y opresivo. Uno de los ejemplos más
claros de este concepto se puede leer en los primeros compases de La metamorfosis:
"Cuando una mañana se despertó Gregorio Samsa, después de un sueño
agitado, se encontró en su cama transformado en un espantoso insecto".
El
considerado para muchos como el mejor retratista del fracaso humano
reflejaba esa desazón, además, firmando sus escritos como Yerba amarga, pseudónimo que sólo usaba aquellos días en los que la desesperanza era más acuciante en su vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario